¿Real? Espíritu de enfermera cuida a pacientes en Hospital San Felipe
Descubre la historia detrás de la legendaria enfermera que, según testigos, sigue apareciéndose en los pasillos del Hospital San Felipe para cuidar a los enfermos, décadas después de su muerte.
El Hospital San Felipe, uno de los más antiguos y emblemáticos de Honduras, es también escenario de una de las historias paranormales más conocidas del país.
A lo largo de sus más de 100 años de existencia, este centro de salud ha sido testigo de numerosos relatos inexplicables, pero ninguno causa tanto impacto como la historia de la “enfermera fantasma” que, según se cuenta, sigue velando por los pacientes incluso después de su muerte.
Hace varias décadas, una enfermera conocida por su dedicación y cariño hacia los enfermos perdió la vida de forma trágica mientras ejercía su turno. Su fallecimiento conmovió tanto a sus compañeros como a los pacientes, quienes la recordaban como una persona comprensiva y empática.
Sin embargo, lo más sorprendente es que, años después de su muerte, comenzaron a surgir relatos de su presencia en el hospital.
Testimonios de pacientes aseguran que, en las horas de la madrugada, una enfermera con un uniforme blanco y anticuado entra a sus habitaciones para acomodarles la almohada, preguntarles si se sienten bien y verificar si necesitan algo.
Camina silenciosamente por los pasillos
Lo inquietante es que en el horario en el que estos avistamientos ocurren, no hay personal asignado en la sala, y ningún miembro del equipo del hospital coincide con la descripción de esta misteriosa figura.
El relato se hace aún más escalofriante cuando miembros del personal, incluidos guardias de seguridad, aseguran haber visto a una enfermera caminando silenciosamente por los pasillos, casi flotando, siempre vestida con el mismo uniforme pasado de moda.
Al intentar acercarse a ella, la figura desaparece sin dejar rastro, dejando a todos perplejos.
Tras investigar a fondo, se descubrió que las descripciones de la enfermera fantasma coincidían con las de la mujer que había perdido la vida en un accidente años atrás. Para algunos, su presencia es vista como la de un espíritu protector que sigue cuidando a los enfermos, mientras que para otros, su aparición en los pasillos del hospital genera temor y desconcierto.